domingo, 19 de julio de 2009

|Septima Costilla|

Hola tu, poema rebuscado,
Excusa para no ir a la cama por miedo a soñar,
Pedante recuerdo de quien ama y se permite limitar,
Aterrante imagen que he juzgado.

Quieres hablar sobre ese espectro a quien adoro,
El joven aquel de la sexy patilla,
Una especie de musa masculina,
Esencia que se siente en la séptima costilla.

Hola tu, testigo de esas conversaciones filólogas,
De algunas percepciones, de par de discusiones,
De aquellas contradicciones retoricas,
Dios del cinismo mágico y esclavo del realismo prosaico.

Tú, que vienes con la fachada de genio musical,
Tócame algo con valentía, dedícame el ritmo de tu picardía,
Desliza tus dedos en mi espina dorsal,
Haz con tu lengua la melodía que entona mi cuerpo de manera sensual.

Eres una especie de ángel mítico,
Que emerge de aguas termales en la completa perfección de su desnudez,
Predador que concibe fragancias incitantes,
Pescador que insistente va en busca de su pez.

Pero llega esa Era,
Donde nos encontramos en vida, quizás en muerte,
Donde vale la pena toda la espera,
Una línea temporal que no se olvida fácilmente.

Entonces recordamos,
Donde se encuentra la presencia carnal de nuestros labios audaces,
Un territorio completamente neutral
Donde por medio de mi portal, Hacemos juntos las paces.

NmRizik*

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